La Voz de Avilés entrevistó hace unos días a Alberto García que, como todos sabemos, es el violinista de Celtas Cortos.
La entrevista fue realizada por el periodista Alejandro L. Jambrina y os la dejamos a continuación:
El violín que suena de fondo en los grandes éxitos de la mítica banda Celtas Cortos no es otro que el de Alberto García, integrante del grupo vallisoletano que actuará en el recinto del Festival Intercéltico de Avilés, en la Pista de La Exposición. Lo hace junto a sus compañeros, Goyo Yeves y Jesús Cifuentes, pero él toma partido y hace un balance junto a LA VOZ de cómo han vivido estos años de pandemia, lo importante que es la música celta en Asturias e incluso adelanta plazos para los próximos proyectos del grupo, que cumple 38 años.
-Hace dos años tuvieron que suspender su concierto en Avilés y justo después llegó la pandemia, ¿han sido años complicados?
-La verdad es que sí, el año pasado arrancó un poco el contacto con la normalidad, pero no del todo porque todavía hubo muchos vaivenes con esto de la pandemia. Mitad de aforo en los conciertos, con la mascarilla… La verdad es que fue un poco desquiciante. Este año, por fin, hemos recuperado el contacto y el pulso que tenía todo esto antes, ya está todo prácticamente igual y vamos a hacer unos setenta conciertos así que ‘virgencita que me quede como estoy’. No, la verdad es que estamos muy contentos con lo que estamos viviendo, tenemos mucha energía renovada, estamos tocando canciones nuevas en el repertorio y realmente estamos muy agradecidos a la vida en general por lo que nos toca. Sabemos que mucha gente no ha recuperado el pulso y eso es duro.
-El Festival Intercéltico de Avilés tiene una esencia muy callejera, ¿preparados para darlo todo con el público?
-Desde el principio hemos tenido un lema y es que nos vale cualquier cuadrilátero para liarla y en Avilés será así. Somos carne de jolgorio, de festivales y de espacios abiertos donde haya mucho mondongo de gente con ganas de pasarlo bien, ahí estamos en nuestra salsa. También hemos hecho giras para teatros con repertorios más contenidos y también le sacas el gusto, está más enfocado a que la gente te escuche con atención. Pero la verdad es que en un tinglao de mucha gente con ganas de lío estamos en nuestra salsa y tenemos ganas de pasarlo bien mañana.
-Bieito Romero (Luar na Lubre) comentaba en una entrevista con LA VOZ que la música celta está más de moda que nunca, ¿coincide con eso?
-Pues sí, algo parece que hay como de vuelta a lo que se vivió en los años noventa, ese gusto por la música celta. Ya no sé si hay permiso para llamarla así, hay quienes dicen que eso de la música celta ya no existe, en realidad nunca ha sido más que un sello comercial para que la gente se arrimara a este tipo de músicas tan variadas. Pero sí, creo que hay una especie de gusto por las raíces de lo que yo llamo ‘música verde’, que está tan arraigado en todo el norte de España y en las islas británicas.
-Uno de esos lugares es Asturias, sin duda, ¿cómo se lo pasan por aquí?
-Pues genial, en Asturias y Galicia hay hordas de gente recuperando y mezclando estilos de música diferentes e instrumentos tradicionales. Asturias es un territorio en el que está muy vivo todo esto, te quedas boquiabierto.
Nuevo proyecto
-Llevan años sin sacar disco, adelántenos algo del próximo…
-Pues lo que pasa es que la pandemia nos frenó mucho, nos enclaustramos cada uno en nuestra propia vida para sujetar a nuestro ámbito familiar. La actividad la hemos retomado muy poco a poco y vamos preparando temas y grabando, pero sin la premura de grabar un disco, hemos subido algún tema a internet y estamos en eso. Sin prisa, disfrutando del momento que estamos viviendo y de la vuelta. Quizás este otoño nos planteemos un poco más en serio un nuevo proyecto con calendario.
-¿Cómo lleva un grupo de la vieja escuela esta tendencia a subir canciones constantemente a las redes para promocionarse?
-Pues regular. Las redes tienen la parte buena de que puedes estar en contacto con el público en todo momento, que es imprescindible hoy en día y parece que es lo que se impone. Pero nosotros estaremos muy mayores, será que somos muy vagos o una mezcla de las dos, pero el tema de estar actualizando continuamente tu vida creativa y privada no lo llevamos muy bien. No van mucho con nosotros, pero ahí estamos, hay gente que lo tiene asumido de manera natural.